En Funcionalia, si hay algo que nos gusta, son los retos, y si ese reto viene de mano de una compañía como Airbus, aún más.
Lo primero era desarrollar un dron que pudiera volar, un dron formado en su mayor parte por piezas y componentes realizados en impresora 3D. Una vez se tuvo un prototipo con unas condiciones de vuelo óptimas, se empezó a trabajar de forma simultanea en distintas áreas: por un lado en un sistema de comunicaciones propio, gestionado de forma autónoma por un servidor o consola central, que sirvió de centro de operaciones y que, en función de los parámetros, sistemas de vuelo y posición de los drones mantendría o modificaría los distintos planes de vuelo.
Este sistema sería capaz de detectar desvíos en las trayectorias de los drones, errores en las comunicaciones… En definitiva un sistema de vuelo inteligente capaz de gestionar drones de forma simultánea.
Por otro lado, se desarrollaron aplicaciones para IOS de forma que desde esta pudieran controlar un enjambre, control por voz…